Aportaciones de la tecnología a la e-evaluación
Uno de los puntos fuertes en la educación en línea seria la flexibilidad del horario, también se considera una ventaja la información que se aporta al alumno en línea sobre la totalidad de la secuencia didáctica que asegura en un periodo de tiempo concreto y necesariamente programado.
El alumno tiene que contar con una perspectiva de todo el proceso formativo de un modo claro que va más allá de la clase a la que asiste en un momento determinado como puede pasar en muchos casos en la enseñanza presencial. Por lo tanto tiene un plan de trabajo, guías de estudio y calendarios que orientan en esta secuencia temporal de aprendizaje. Otro de los puntos fuertes es, el marco en el que se enclava el proceso de enseñanza y aprendizaje: el ciberespacio, su acceso a el y todo lo que se supone a nivel educativo e informativo.
Uno de los puntos débiles se podría decir, en primer lugar y en contraposición de lo apuntado en el apartado de ventajas sobre la flexibilidad horaria y espacial de acceso que existe una cierta inflexibilidad instruccional, en tanto que al final la docencia se convierte en un cúmulo de tareas con fechas de finalización e inicio.
Otro punto interesante que se valora como un aspecto débil es la propia sensación de logro que tiene el alumno, el alumno va ejecutando tareas y teniendo resultados de ellas pero consigue con cierta dificultad una idea de conjunto de la materia y de su progresión en ella.
La evaluación del aprendizaje es algo pendiente a mejorar, algo sobre lo que hay que reflexionar con mayor profundidad, que hay que desarrollar de un modo mas creativo y volver sobre ello invirtiendo mas recursos pedagógicos y tecnológicos con el fin no solo de innovar sino de llegar a una evaluación satisfactoria para profesores, alumnos e instituciones.
La evaluación puede ser entendida como evaluación del aprendizaje; es decir, la evaluación que nos da como resultado, el fruto de la aplicación de la función mas normativa y social de la evaluación, la conformidad de si los alumnos son o no capaces delante de la sociedad de saber y de ser competentes en un determinado ámbito. La evaluación no es solamente evaluación del aprendizaje sino que es también evaluación para el aprendizaje. En la evaluación para el aprendizaje el eje motor principal es la retroalimentación y el aprovechamiento que de este realizan los alumnos y los docentes. Es en el marco del dialogo entre profesor y alumnos que se organiza alrededor del contenido y del quehacer académico en el que se ofrece una ayuda y respuesta ajustada, coherente y contextualizada en la materia de estudio que sirve para avanzar en el conocimiento.
El marco educativo modificado a causa de la introducción de la tecnología se resalta 3 grandes cambios que la tecnología ha aportado en el contexto de la evaluación. Se trata de , 1- la evaluación automática, en el sentido que la tecnología contiene bancos de datos que se relacionan entre ellos y se pueden ofrecer a los alumnos respuestas y correcciones inmediatas. 2- la segunda aportación de la tecnología en el campo evaluativo se identifica mediante una evaluación de tipo enciclopédico, en referencia al cúmulo de contenidos que se maneja de una fuente mas compleja o de diferentes fuentes. 3- y la tercera aportación destacable se refiere a la evaluación colaborativa.
Si se revisa con detalle el proceso completo de evaluación y los componentes técnicos que están en juego vemos que la evaluación es mas que los instrumentos de recogida de evidencias evaluativos.
Naturalmente se evalúa para comunicar resultados de diferente naturaleza, cualitativos y cuantitativos, y todo ello contribuye a situar al alumno en la normal general de consecución de un conocimiento concreto y para mejorar progresivamente sus consecuciones.
miércoles, 3 de junio de 2009
Defensa del plan de estudios nacional en Inglaterra( defensibility of national curriculum in England)
Por la serie de documentos mencionados sobre William ha montado un caso contra disposiciones de evaluación de plan de estudios presentes nacionales y ha diseñado el contorno de un modelo alternativo. Sintetizando pruebas y argumentos desde más allá de estos documentos, su posición puede ser representada por las cuatro reclamaciones siguientes:
las consecuencias de resultados de prueba de etapa de final de llave no son de confianza, careciendo tanto fiabilidad como validez de habilidades normales para la evaluación de plan de estudios nacional con eficacia.
los sistemas que abrazan múltiples objetivos de evaluación casi inevitablemente causan objetivos evaluativos de desplazar formativos y esto es verdadero de evaluación del plan de estudios nacional en Inglaterra.
un nuevo acercamiento a pruebas, implica el empleo de múltiple prueba/tareas y un muestreo ligero " la metodología, podría proporcionar pruebas para apoyar consecuencias válidas para estacas altas objetivos evaluativos.
un nuevo acercamiento a la evaluación de profesor, basada sobre un perfil solo de información de evaluación de aula para cada estudiante, podría proporcionar pruebas para apoyar consecuencias válidas para lo formativo y objetivos.
Como la evaluación de plan de estudios nacional implica intereses relativamente bajos para estudiantes individuales, el efecto debería asegurar que intereses relativamente bajos conectados a la evaluación de profesor, mientras altos intereses fueron limitados a las prueba/tareas externa.
William demanda que el significado de resultados de prueba de plan de estudios nacionales ha sido corrompido con el tiempo, y que ellos más pueden apoyar inferencias válidas sobre la habilidad en los dominios de materia básica.
El argumento primero fue que las pruebas no pueden evaluar lo que ellos deberían ser, constituye un desafío principal al empleo de resultados de prueba para supervisar el progreso hacia objetivos nacionales.
El gobierno ha publicado datos de fiabilidad sólo limitados sobre pruebas de plan de estudios nacionales, pero es probable que la proporción de estudiantes concedió un nivel más alto o más abajo que ellos deberían ser debido a la infiabilidad de las pruebas es al menos el 30 % en la etapa clave 2 y puede ser tan alto como el 40 % en la etapa clave.
Guillermo argumenta que pruebas de plan de estudios nacionales fiable fallan en evaluar seguro de los objetivos que aprenden de sus programas de estudio. Sin embargo, Davis, él no demanda que es imposible evaluar objetivos de estudio más sutiles con pruebas o tareas. Su oferta es emplear mas pruebas y tareas que, con eficacia prueban el dominio entero cada año.
Es decir si las pruebas de plan de estudios presentes nacionales probaran más a fondo entonces ellos fiables no fallarían en representar ciertos objetivos de estudio después de todo, y la enseñanza a la prueba no el compromiso construye la validez. Bien puede haber alguna fuerza en este argumento. Sin embargo, como William propone, ciertos objetivos de estudio pueden requerir la clase de evaluación autentica que tomaría demasiado tiempo para permitir a la instalación dentro de una prueba tradicional.
Si cada prueba de plan de estudios nacional incluyera una o dos tareas de evaluación ampliadas al azar probadas de la de grado en tareas posibles entonces esto ayudaría a debilitar el desafío a la validez.
Guillermo tiene también el derecho de promover el ideal formativo. La evaluación para el estudio ha carecido de una identidad y esto ha dificultado tanto desarrollo teórico como la puesta en práctica.
Por la serie de documentos mencionados sobre William ha montado un caso contra disposiciones de evaluación de plan de estudios presentes nacionales y ha diseñado el contorno de un modelo alternativo. Sintetizando pruebas y argumentos desde más allá de estos documentos, su posición puede ser representada por las cuatro reclamaciones siguientes:
las consecuencias de resultados de prueba de etapa de final de llave no son de confianza, careciendo tanto fiabilidad como validez de habilidades normales para la evaluación de plan de estudios nacional con eficacia.
los sistemas que abrazan múltiples objetivos de evaluación casi inevitablemente causan objetivos evaluativos de desplazar formativos y esto es verdadero de evaluación del plan de estudios nacional en Inglaterra.
un nuevo acercamiento a pruebas, implica el empleo de múltiple prueba/tareas y un muestreo ligero " la metodología, podría proporcionar pruebas para apoyar consecuencias válidas para estacas altas objetivos evaluativos.
un nuevo acercamiento a la evaluación de profesor, basada sobre un perfil solo de información de evaluación de aula para cada estudiante, podría proporcionar pruebas para apoyar consecuencias válidas para lo formativo y objetivos.
Como la evaluación de plan de estudios nacional implica intereses relativamente bajos para estudiantes individuales, el efecto debería asegurar que intereses relativamente bajos conectados a la evaluación de profesor, mientras altos intereses fueron limitados a las prueba/tareas externa.
William demanda que el significado de resultados de prueba de plan de estudios nacionales ha sido corrompido con el tiempo, y que ellos más pueden apoyar inferencias válidas sobre la habilidad en los dominios de materia básica.
El argumento primero fue que las pruebas no pueden evaluar lo que ellos deberían ser, constituye un desafío principal al empleo de resultados de prueba para supervisar el progreso hacia objetivos nacionales.
El gobierno ha publicado datos de fiabilidad sólo limitados sobre pruebas de plan de estudios nacionales, pero es probable que la proporción de estudiantes concedió un nivel más alto o más abajo que ellos deberían ser debido a la infiabilidad de las pruebas es al menos el 30 % en la etapa clave 2 y puede ser tan alto como el 40 % en la etapa clave.
Guillermo argumenta que pruebas de plan de estudios nacionales fiable fallan en evaluar seguro de los objetivos que aprenden de sus programas de estudio. Sin embargo, Davis, él no demanda que es imposible evaluar objetivos de estudio más sutiles con pruebas o tareas. Su oferta es emplear mas pruebas y tareas que, con eficacia prueban el dominio entero cada año.
Es decir si las pruebas de plan de estudios presentes nacionales probaran más a fondo entonces ellos fiables no fallarían en representar ciertos objetivos de estudio después de todo, y la enseñanza a la prueba no el compromiso construye la validez. Bien puede haber alguna fuerza en este argumento. Sin embargo, como William propone, ciertos objetivos de estudio pueden requerir la clase de evaluación autentica que tomaría demasiado tiempo para permitir a la instalación dentro de una prueba tradicional.
Si cada prueba de plan de estudios nacional incluyera una o dos tareas de evaluación ampliadas al azar probadas de la de grado en tareas posibles entonces esto ayudaría a debilitar el desafío a la validez.
Guillermo tiene también el derecho de promover el ideal formativo. La evaluación para el estudio ha carecido de una identidad y esto ha dificultado tanto desarrollo teórico como la puesta en práctica.
lunes, 1 de junio de 2009
La evaluación de la relación educativa en la universidad
La evaluación ha sido parte fundamental de la planeación educativa, sin embargo, no es sino al final de los años ochenta en México, cuando adquiere dimensiones de relevancia especial, ya que surge como instrumento para mejorar la calidad del sistema escolar, como medio para tener acceso a distintos programas de compensación salarial para el personal académico y como condición para obtener recursos económicos adicionales a nivel institucional. Desde el momento en que se hizo explícito que los procesos de evaluación tendrían la finalidad de diferenciar y reconocer el trabajo realizado por las instituciones y los académicos, la relación entre evaluación y resultados tomó una nueva dimensión. Las estrategias de negociación financiera que habían sostenido las universidades públicas y el gobierno cambiaron, al menos discursivamente. A partir de entonces las instituciones y los individuos tuvieron acceso a ingresos complementarios, en función de los resultados de los procesos evaluativos. Adicionalmente a la tendencia evaluación-financiamiento se agregó la acreditación como estrategia para asegurar la calidad de los servicios educativos, de acuerdo con los discursos de los documentos oficiales. Por esta razón, entre otras, la evaluación se ha constituido en poco tiempo, relativamente, en una parte esencial de las actividades cotidianas de las universidades. La evaluación educativa se considera un pilar de las políticas actuales de la educación superior, ya que forma parte de los procesos de planeacion impulsados por los programas de los organismos del gobierno federal vinculados al sector educativo, con el sesgo mencionado anteriormente derivado de su asociación con aspectos financieros. En el caso de las universidades públicas la evaluación se implementa de forma generalizada desde la década de los noventa hasta nuestros días, a partir de las políticas promovidas por organismos oficiales como la SEP y la ANU. En los últimos años las políticas del sector educativo han tenido a propiciar una acreditación de los programas de formación profesional, derivada del escrutinio minucioso de pares académicos que cuentan con el reconocimiento del organismo oficial encargado de cumplir con esta función, de tal manera que, a las acciones de evaluación institucional de planes y programas y las dirigidas a los académicos se suma este nuevo esfuerzo por lograr elevar la calidad del sector.
Los agentes que promueven el inicio de los procesos de evaluación de la docencia son directivos o personas cercanas a la administración en turno, quienes reciben la encomienda de diseñar y conducir dichos procesos, con la justificación de que estas actividades forman parte de los planes institucionales o de que la administración central así lo determino.
Los cuestionarios de opinión dirigidos a los estudiantes son la unica manera para las universidades de dar respuesta a las politicas de evaluación de la docencia, si bien se pueden detectar intentos aislados de diversificar o complementar esta forma de evaluar con otras fuentes.
La evaluación de la docencia a través de los cuestionarios de opinión de los estudiantes se reconoce como la estrategia más utilizada y polémica en el ámbito universitario.
En algunas universidades además del cuestionario de opinión de los estudiantes se emplean cuestionarios de autoevaluacion de los profesores, la evaluación de pares académicos y los directivos.
En algunas universidades, las instancias encargadas de la operación del proceso de evaluación dan a conocer los resultados a directivos y docentes, mientras que en otras los resultados se ponen a disposición de toda la comunidad escolar; esto permite reflexionar sobre la intención de quienes promueven los procesos de evaluación, ya que si se trata de afectar la calidad de la docencia, no es justificable que se evalúen muestras o no se den a conocer los resultados a los mismos evaluados.
La evaluación de la docencia constituye una actividad social que, como tal, esta llena de juicios de valor, no igualmente presentes en la conciencia de todos los involucrados. A demás no necesariamente la participación en estos procesos se hace con la equidad deseada para todos los actores, por lo que deben de garantizarse canales de dialogo que efectivamente conduzcan al mejoramiento de los procesos de evaluación para lograr practicas efectivas de enseñanza y aprendizaje.
La evaluación ha sido parte fundamental de la planeación educativa, sin embargo, no es sino al final de los años ochenta en México, cuando adquiere dimensiones de relevancia especial, ya que surge como instrumento para mejorar la calidad del sistema escolar, como medio para tener acceso a distintos programas de compensación salarial para el personal académico y como condición para obtener recursos económicos adicionales a nivel institucional. Desde el momento en que se hizo explícito que los procesos de evaluación tendrían la finalidad de diferenciar y reconocer el trabajo realizado por las instituciones y los académicos, la relación entre evaluación y resultados tomó una nueva dimensión. Las estrategias de negociación financiera que habían sostenido las universidades públicas y el gobierno cambiaron, al menos discursivamente. A partir de entonces las instituciones y los individuos tuvieron acceso a ingresos complementarios, en función de los resultados de los procesos evaluativos. Adicionalmente a la tendencia evaluación-financiamiento se agregó la acreditación como estrategia para asegurar la calidad de los servicios educativos, de acuerdo con los discursos de los documentos oficiales. Por esta razón, entre otras, la evaluación se ha constituido en poco tiempo, relativamente, en una parte esencial de las actividades cotidianas de las universidades. La evaluación educativa se considera un pilar de las políticas actuales de la educación superior, ya que forma parte de los procesos de planeacion impulsados por los programas de los organismos del gobierno federal vinculados al sector educativo, con el sesgo mencionado anteriormente derivado de su asociación con aspectos financieros. En el caso de las universidades públicas la evaluación se implementa de forma generalizada desde la década de los noventa hasta nuestros días, a partir de las políticas promovidas por organismos oficiales como la SEP y la ANU. En los últimos años las políticas del sector educativo han tenido a propiciar una acreditación de los programas de formación profesional, derivada del escrutinio minucioso de pares académicos que cuentan con el reconocimiento del organismo oficial encargado de cumplir con esta función, de tal manera que, a las acciones de evaluación institucional de planes y programas y las dirigidas a los académicos se suma este nuevo esfuerzo por lograr elevar la calidad del sector.
Los agentes que promueven el inicio de los procesos de evaluación de la docencia son directivos o personas cercanas a la administración en turno, quienes reciben la encomienda de diseñar y conducir dichos procesos, con la justificación de que estas actividades forman parte de los planes institucionales o de que la administración central así lo determino.
Los cuestionarios de opinión dirigidos a los estudiantes son la unica manera para las universidades de dar respuesta a las politicas de evaluación de la docencia, si bien se pueden detectar intentos aislados de diversificar o complementar esta forma de evaluar con otras fuentes.
La evaluación de la docencia a través de los cuestionarios de opinión de los estudiantes se reconoce como la estrategia más utilizada y polémica en el ámbito universitario.
En algunas universidades además del cuestionario de opinión de los estudiantes se emplean cuestionarios de autoevaluacion de los profesores, la evaluación de pares académicos y los directivos.
En algunas universidades, las instancias encargadas de la operación del proceso de evaluación dan a conocer los resultados a directivos y docentes, mientras que en otras los resultados se ponen a disposición de toda la comunidad escolar; esto permite reflexionar sobre la intención de quienes promueven los procesos de evaluación, ya que si se trata de afectar la calidad de la docencia, no es justificable que se evalúen muestras o no se den a conocer los resultados a los mismos evaluados.
La evaluación de la docencia constituye una actividad social que, como tal, esta llena de juicios de valor, no igualmente presentes en la conciencia de todos los involucrados. A demás no necesariamente la participación en estos procesos se hace con la equidad deseada para todos los actores, por lo que deben de garantizarse canales de dialogo que efectivamente conduzcan al mejoramiento de los procesos de evaluación para lograr practicas efectivas de enseñanza y aprendizaje.
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